El café espresso no es solo una de las bebidas favoritas del mundo, sino que forma parte de la identidad de los italianos y un orgullo nacional. Esta bebida representa una gran tradición cultural muy arraigada a sus raíces e historias y se espera que el café expreso puede volverse patrimonio de la humanidad.
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El café espresso podría pasar a ser Patrimonio Inmaterial de la Humanidad
, por parte de la ante la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) gracias a su importancia culinaria, histórica y cultural; y después de ser aprobada por unanimidad en enero de 2022, las autoridades enviaron la candidatura a una comisión nacional italiana ante la Unesco.
Gian Marco Centinaio, el subsecretario de Agricultura afirmó sentirse muy satisfecho de que se haya logrado una candidatura unificada, para que el café espresso sea Patrimonio de la Humanidad:
Confiamos en que la comisión apruebe la solicitud y sea enviada a París antes del 31 de marzo.
Esta no es la primera vez que Italia hace esta solicitud. En 2016 y 2020 postuló la candidatura, pero no procedió.
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El café espresso: Un ícono de la cultura e identidad italiana
El café espresso además de ser parte de la cultura e identidad italiana, es una especie de culto ellos. Es una bebida indispensable y un símbolo Made in Italia; se caracteriza por su espuma avellanada, entre marrón oscuro y rubio intenso, de textura fina en su crema y con pequeñas burbujas.
Cuando los granos están tostados correctamente y el café bien preparado, su sabor es suave. Eso sí, con esos dejos ácidos y amargos equilibrados, sin caer en astringencia.
Gian Marco Centinaio, el subsecretario de Agricultura mencionó:
Para nosotros es un verdadero ritual, una parte integral de nuestra identidad nacional y una expresión de nuestra sociabilidad que nos distingue en el mundo; pero también se refleja en la literatura y es disfrutado en todo el país, desde Nápoles a Venecia, pasando por Trieste, Roma y Milán.