El propósito de toda casa de terror, es poner a prueba a sus visitantes y llevar al límite sus capacidades de afrontar el miedo, sin embargo McKamey Manor es una atracción que lleva esto a un límite totalmente extremo.
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Un nuevo nivel de terror con McKamey Manor
Ubicada en Summertown, Tennessee, McKamey Manor es una casa embrujada que más que casa de sustos, la descripición correcta sería una cámara de tortura.
Operada por Russ McKamey, un hombre común y corriente, agradable y atento a sus visitantes, quien curiosamente es la mente maestra detrás de todas las torturas que sufren quienes se aventuran a entrar, ofrece una jugosa recompensa a quienes logren terminar el recorrido.
20 mil dólares serán para aquellos valientes que superen todos los obstáculos, sin embargo, hasta ahora no ha habido una sola persona que haya logrado llegar al final.
Con justificada razón se ha ganado el sobrenombre de la «casa embrujada más aterradora» en los USA, y si no nos crees, checa esto…
Es tal el estrés al que los aventureros se someten, que uno de los requisitos para poder participar es presentar un exámen físico deportivo, así como médico que respalde un estable estado físico y mental para poder hacer el recorrido.
A estos, se suma un examen toxicológico y firmar una carta responsiva donde claramente aceptan todas las torturas por las que pasarán, entre las que se incluyen comer insectos, asfixia, tortura psicológica y algunos otros donde realmente resultarán lastimados.
¿Qué debe motivar a una persona a «voluntariamente» ofrecerse a ser torturado y castigado? Además de los 20 mil dólares, el saber que pasarás por condiciones realmente infrahumanas y humillantes, requiere algo más que valor.
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¿Cuánto debes pagar para poder vivir esta experiencia? El dueño pide únicamente como «cuota» de acceso una bolsa de 23 kg de comida para perros, misma que dona a un refugio de animales. Una acción muy noble para alguien que es conocido por torturar turistas…