Imagina un lugar donde el lujo se fusiona con la naturaleza, donde las playas casi vírgenes se encuentran con majestuosas colinas y el espíritu bohemio impregna cada rincón. Ese lugar es Careyes, un exclusivo destino en la costa de Jalisco, México, que por décadas ha sido el refugio predilecto de celebridades y amantes del buen vivir que buscan una escapada sin igual.
El sueño de un visionario italiano
La historia de Careyes es tan fascinante como el lugar mismo. Todo comenzó hace aproximadamente 60 años, cuando el banquero italiano Gianfranco Brignone, hoy conocido como el fundador de Careyes, sobrevoló la costa de Jalisco en busca de nuevas inversiones. Lo que descubrió fue un paisaje asombroso de bahías, playas inmensas y exuberante vegetación.
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Cuentan que, cautivado por la belleza, Brignone cerró el trato de compra por casi 13 kilómetros de costa en el mismo avión. Así, lo que alguna vez fue un territorio inexplorado y sin carreteras, comenzó a transformarse, manteniendo siempre una esencia de exclusividad y conexión con la naturaleza. Poco a poco, Brignone fue vendiendo parcelas más pequeñas, permitiendo que otros constructores y familias se unieran a su visión, dando origen al distintivo estilo Careyes: palapas con techos altos, amplios espacios abiertos, paredes curvas y una paleta de colores vibrantes.

Un oasis de lujo con sello propio
Hoy en día, Careyes es una comunidad vibrante con más de 200 propiedades que acogen a residentes de más de 40 nacionalidades. Desde elegantes apartamentos y casitas hasta espectaculares villas de lujo, la mayoría de las propiedades están disponibles para renta, ofreciendo una experiencia inmersiva en este paraíso. Según Susana Fajer, quien está a cargo de grupos y eventos en la oficina de reservaciones y relaciones públicas de Careyes, «ha sido un secreto muy bien guardado por muchos años porque siempre ha sido como de voz en voz».
Esta exclusividad ha atraído a un sinfín de personalidades, desde las Kardashian y Salma Hayek hasta Luis Miguel, quienes buscan la discreción y el encanto único que ofrece Careyes. De hecho, en Leisure and Lux tuvimos el privilegio de hospedarnos en la icónica Villa Sol de Oriente, una muestra del tipo de alojamiento sublime que se puede encontrar aquí. Los alojamientos ofrecen servicios de limpieza y conserjería, con opciones de staff completo, mayordomo y chef privado en las villas de mayor categoría. Los precios por noche varían considerablemente, desde los $400 USD en los departamentos hasta los $2,000 USD o más en las villas más lujosas.

Entre las joyas imperdibles está Villa Dragón, una villa escultórica enclavada en la cima de una península, rodeada de acantilados y con una piscina infinita que se funde con el mar. Cada espacio está pensado para asombrar, desde sus terrazas con vista al atardecer hasta su interiorismo con piezas de arte mexicano contemporáneo. Es ideal para quienes buscan lujo, aislamiento y una conexión íntima con la naturaleza.
Otra excelente opción es El Careyes Club & Residences, un conjunto de departamentos de lujo que ofrece la comodidad de un resort boutique con la privacidad de una residencia. Cuenta con playa privada, cinco albercas, un restaurante de autor, club de playa, servicio de concierge y actividades exclusivas como paddleboard, snorkel y yoga al amanecer.
Cada alojamiento en Careyes promete mucho más que una estancia: es una inmersión en el arte de vivir bien, en un entorno donde el lujo nunca es ostentoso, pero siempre extraordinario.

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La temporada alta en Careyes se extiende de noviembre a Pascua, marcando un periodo de gran actividad y eventos de renombre. Inicia con el místico Festival Ondalinda (https://ondalinda.com), un evento de música electrónica al estilo Burning Man, sumamente exclusivo y con un aforo limitado a 600-800 personas, que combina la música con el bienestar. Para asistir a Ondalinda, necesitas tener un gran presupuesto, ya que es con invitación y debes confirmar tu alojamiento antes de obtener el boleto».
La temporada culmina con la prestigiosa Range Rover Copa Agua Alta de Polo en abril, un evento que atrae a jugadores y aficionados de todo el mundo, consolidando la reputación de Careyes por sus grandes canchas y torneos de polo, que inician desde finales de noviembre con el Día de Acción de Gracias. Además de los eventos, la temporada alta ofrece una vibrante vida social con fiestas y cócteles por invitación.
Naturaleza y bienestar todo el año
Más allá del glamour de la temporada alta, Careyes ofrece un abanico de actividades para conectar con la naturaleza. Sus cuatro playas principales (Playa Rosa, Carallitos, Teopa y la de Tigre del Mar) invitan a la relajación y a los deportes acuáticos como el surf y el paddleboard.
En la playa de Teopa, se encuentra un santuario de tortugas marinas, donde se pueden realizar liberaciones de octubre a marzo, coincidiendo con la mejor temporada de anidación. Para los amantes de la aventura, hay numerosas rutas para caminatas, ciclismo de montaña y paseos en bote. Además, como un atractivo turístico imperdible en la región, no puedes dejar de visitar la impresionante Copa del Sol, una monumental obra arquitectónica y artística que se ha convertido en un ícono de Careyes y la Costa Alegre.
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Aunque en temporada baja la actividad nocturna se reduce a los restaurantes existentes, el enfoque se centra en el ecoturismo y el descanso, ofreciendo un refugio de tranquilidad. «La gente que viene acá viene más como justo a buscar el descanso, el no movimiento, a estar en contacto con la naturaleza», señala Fajer.

Careyes: Un secreto que se revela
Por años, Careyes fue un destino conocido principalmente por un público europeo y extranjero, manteniéndose fuera del radar del turismo nacional. Sin embargo, esto está cambiando. «Cada vez se está haciendo más conocido y más gente que quiere y puede venir aquí lo está haciendo», comenta Susana Fajer, destacando el creciente interés del público mexicano en descubrir este lugar incomparable. Con su mezcla única de lujo discreto, arte, cultura y una comunidad internacional, Careyes es verdaderamente «como nada que han visto antes», un tesoro escondido en la costa de Jalisco que invita a ser descubierto y vivido. ¿Estás listo para experimentar el encanto de Careyes?
Si te animas a conocerlo, puedes reservar tu estancia directamente en https://careyes.com/